“Encamíname en tu verdad, ¡enséñame!” (Salmo 25:5ª, NVI) ¡Cuánto debemos aún aprender! Olvidamos nuestra historia o nos quedamos con aquello que nos conviene recordar. La memoria es peligrosa y por ello hay quienes quieren prohibirla. Vivimos presentes fugaces, sin contenido, efímeros, líquidos. No hay tiempo para lo profundo, no hay espacio para los encuentros, para los diálogos que movilizan, para las construcciones colectivas, para las búsquedas compartidas, para los sueños que logran escaparle al “sálvese quien pueda” del neoliberalismo explícito y egoístamente obsceno. ¡Cuánto debemos aún aprender! En contextos en los que las verdades son aquellas que la manipulación mediática […]
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